Conoce la historia detrás de la nueva tipografía de Ford Motor Company

El lenguaje visual de Ford ha evolucionado constantemente, pero la tipografía Ford F-1 marca un antes y un después en su historia. Esta tipografía, desarrollada en colaboración entre el equipo de Tipografías de Ford de México y Design DNA | Digital Product Design en Estados Unidos, fue concebida con una visión clara: garantizar la máxima legibilidad en las pantallas de los vehículos y unificar la identidad visual de la marca en todos sus canales de comunicación.

Una tipografía es un grupo de caracteres (como letras, números y puntuaciones) que poseen el mismo estilo visual, compartiendo características y especificaciones que siguen una línea de diseño. Estas trascienden la percepción estética, ya que también reflejan una identidad propia.

El equipo mexicano de Tipografías, creado hace siete años con el objetivo de mejorar la experiencia de lectura en los entornos digitales de los vehículos, identificó la necesidad de crear una nueva una tipografía propia que reflejara el carácter, el legado y la modernidad de Ford. Así nació Ford F-1, una tipografía diseñada para más clara, funcional y coherente en todos los mercados.

Inspiración del diseño de Ford-F1

La tipografía utilizada anteriormente, Ford Antenna, empleada en las pantallas de vehículos, presentaba diversos desafíos, siendo uno de ellos la falta de consistencia entre el diseño de todos los caracteres que la componían para su uso en diferentes regiones. Esto era especialmente problemático en mercados donde las limitaciones para adaptarla exigían modificar su diseño original, lo que comprometía su legibilidad.

El proceso no fue sencillo. Desarrollar Ford F-1 requirió aproximadamente un año de intensa colaboración entre diversos equipos: el equipo de Tipografías de Ford de México, Design DNA de Estados Unidos y Marketing.

Lanzada en noviembre de 2023 para materiales de marketing, y adaptada internamente desde 2024 para su futura implementación en los vehículos, Ford F-1 comenzó con los idiomas provenientes del latín, para luego expandirse al resto, siendo algunos de ellos árabe, chino y tailandés. Su desarrollo técnico fue posible gracias a la colaboración de socios externos que aseguraron una implementación precisa y universal.

En el marco de los 100 años de Ford en México, este logro representa una celebración tangible del legado que ha construido en el país, y una mirada firme hacia el futuro, con una identidad más sólida, coherente y humana que nunca.