- Este padecimiento es una enfermedad donde se experimenta la ausencia de sonido de forma repentina en menos de 72 horas
- Su incidencia a nivel mundial ha sido reportada entre 5 y 20 casos por cada 100 mil habitantes
Ciudad de México mayo de 2020.- Gracias a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se sabe que en el mundo existen más de 400 millones de personas con pérdida auditiva discapacitante. En México se ubican 694 mil 451 habitantes con deficiencia auditiva, incluyendo a quienes ya utilizan un aparato y a quienes no, lo que equivale al 12.1% del total de la población con alguna discapacidad. Tanto a nivel mundial como local, existen casos que se presentaron a raíz de hipoacusias súbitas idiopáticas.
La hipoacusia súbita presenta una incidencia a nivel mundial de entre 5 y 20 casos por cada 100 mil habitantes por año, aunque recientes investigaciones describen de 160 a 300 pacientes por cada 100 mil habitantes en un año.
Este padecimiento es una enfermedad donde se experimenta la ausencia de sonido
de forma repentina, usualmente sin razón alguna, de ahí el término de
idiopática, ya que al realizar la evaluación clínica no se logra revelar la
causa, por lo que resulta difícil de diagnosticar y de llevar a cabo un
tratamiento. En términos médicos a esta pérdida se le conoce como hipoacusia
neurosensorial súbita idiopática (HNSSI).
Se considera como sordera súbita, aquella hipoacusia neurosensorial o
perceptiva de inicio súbito, en menos de 72 horas, con pérdida de más de 30
dBs, al menos en tres frecuencias consecutivas de la audiometría tonal, sin
otros antecedentes otológicos previo. Una pérdida de este número de decibeles
equivaldría a escuchar una conversación normal como si fuera un susurro, con
base en la información NIDCD.
La edad media de los pacientes con HNSI es entre 40 y 54 años, es menos
frecuente en la infancia y existe igual predominio de la enfermedad en ambos
sexos. La mayoría de estos casos son unilaterales y el oído derecho e izquierdo
tienen igual posibilidad de ser afectados. Los casos bilaterales son poco
comunes y tienen mayor probabilidad de asociarse con enfermedades sistémicas
graves. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de la Sordera y Otros Trastornos
de la Comunicación de Estados Unidos (NIDCD, por sus siglas en inglés), se
calcula que, en este país, este tipo de sordera puede llegar a afectar entre
una y seis personas de cada cinco mil.
La etiología de la sordera súbita en más del 70% de los casos es desconocida.
Si bien no hay causas identificables, ya que es una enfermedad idiopática, sí
existen algunas probabilidades que ya se han estudiado, como, por ejemplo:
infecciones virales, que pueden presentarse en la infancia, vida adulta y
embarazo, tales como paperas, sarampión, rubeola, entre otros; tumores,
traumatismo craneoencefálico, medicamentos e insecticidas, etcétera
Existen diversas teorías respecto a los mecanismos involucrados con base en
estudios de series de casos, que incluyen la Teoría viral, en la
cual diversos estudios han asociado este tipo de patologías a una inflación del
oído interno secundaria a un proceso viral, como ser infección por el virus del
herpes simple tipo 1 al igual que el frecuente antecedente de infecciones de
vías aéreas superiores o su mayor incidencia en determinadas épocas del año.
Teoría de la microcirculación del oído interno, la cual se apoya en que
la microcirculación del oído interno es susceptible a los cambios sutiles en la
misma, siendo los pacientes con riesgo cardiovascular los más afectados según
esta teoría.
Teoría de la enfermedad inmunomediada, los estudios anatomopatológicos,
las curaciones espontáneas y la respuesta al tratamiento con esteroides pueden
apoyar esta teoría.
Ante una sospecha clínica de Sordera Súbita, y antes de plantear un posible
tratamiento, la evaluación integral por un especialista en otorrinolaringología
en conjunto con la del especialista en audiología, son necesarias y amerita
atención de urgencia. Dentro de las pruebas diagnósticas prioritarias se pueden
destacar, la evaluación otológica y audiológica completa, estudios de
audiometría tonal, audiometría verbal (logoaudiometría e impedanciometría). En
el momento que se presente la falta de audición es necesario acudir al especialista
antes de que el problema sea grave e irreversible, puntualiza la Dra.
Jimena Atuán Rodas; Especialista en Audiología, Foniatría y Otoneurología de
MED-EL.
MED-EL reafirma su compromiso con la audición de los mexicanos y los exhorta a
realizarse chequeos auditivos con periodicidad para preservar su calidad de
vida.
Acerca de MED-EL
MED-EL, con sede principal en Innsbruck (Austria) y 30 oficinas distribuidas
por todo el mundo, es un proveedor internacional líder en sistemas de implantes
auditivos. En 1977, la Dra. Ingeborg Hochmair y el Prof. Dr. Erwin Hochmair,
científicos austríacos y fundadores de la empresa, desarrollaron el primer
implante coclear multicanal, mientras que en 1990 sentaron las bases de la
historia de la empresa con la contratación de los primeros empleados.
Actualmente, la empresa dispone de 2,000 empleados.
El implante coclear fue y sigue siendo la primera sustitución eficaz y factible
de un órgano sensorial. Los implantes cocleares, los implantes de oído medio,
el sistema EAS (Estimulación Acústica Eléctrica combinada), el implante de
tronco cerebral (ABI), así como el primer implante activo de conducción ósea,
conforman la gama de productos más amplia del mundo que MED-EL ofrece en el
sector de soluciones implantables para el tratamiento de los distintos tipos de
pérdidas de audición. Hoy en día, los pacientes de más de 123 países en todo el
mundo pueden oír gracias a los productos de MED-EL.