Crédito desde un smartphone: 5 puntos que lo vuelven el más inclusivo en México
Ciudad de México, julio de 2024.- En México, acceder a un crédito sigue siendo un desafío con barreras significativas para millones de personas. Los mitos alrededor del buró de crédito y el score crediticio, además del temor de los usuarios a ser víctimas de un fraude digital y/o un ciberataque, son parte de estas barreras para un gran número de mexicanos.
El puntaje dentro del buró de crédito tiene un objetivo claro, utilizarlo como el único indicador para medir la capacidad de pago de los mexicanos, y en ocasiones etiquetar a los mexicanos como ‘buenos’ o ‘malos’ pagadores, sin considerar circunstancias individuales, lo que crea un desbalance en el acceso a servicios financieros.
En este contexto, el crédito digital, regulado por la Condusef, se presenta como una alternativa inclusiva y accesible. Tala, plataforma de préstamos digitales, explica por qué el crédito desde un smartphone es una herramienta poderosa para la inclusión financiera.
1. No limita a los usuarios por su historial crediticio: A diferencia de las instituciones financieras tradicionales, el crédito digital no se basa únicamente en este factor. Por el contrario, en lugar de excluir a estos individuos, se les brinda una oportunidad justa de demostrar su capacidad de pago, mediante otros datos relacionados a su estilo de vida reflejados en su smartphone.
Esto permite que personas sin historial o con un historial limitado puedan acceder a financiamiento de forma sencilla y sin peligro de incurrir en una deuda que posteriormente no puedan pagar.
2. Es rápido, pero seguro: A pesar de la rapidez con la que se puede obtener un crédito digital, la seguridad de los datos es primordial. Tala, por mencionar un ejemplo, cumple con estándares internacionales como ISO 27001, garantizando la protección de la información de los usuarios.
Esto es relevante sobre todo en un entorno donde el 98% de los ataques de malware están dirigidos a dispositivos Android, por lo que es crucial que las plataformas financieras aborden proactivamente las preocupaciones de seguridad.
3. No excluye a quienes no están bancarizados: Una gran parte de la población no tiene acceso a servicios bancarios tradicionales. De hecho, datos de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF), indican que sólo el 32.7% de la población de 18 a 70 años en México tiene acceso a un crédito formal.
El crédito desde un smartphone, se posiciona como una solución inclusiva para este sector subatendido, proporcionando orientación financiera y apoyo para aquellos que, tradicionalmente, han sido ignorados por los bancos tradicionales.
4. Es escalable: Esto depende del comportamiento de pago del cliente. Estos servicios se adaptan y crecen conforme el cliente paga con puntualidad, lo que les brinda un sentido aún mayor en materia de confianza y permite que accedan a mayores montos progresivamente, creando una relación de crecimiento mutuo.
Esto es lo contrario al crédito tradicional, que por sus condiciones complicadas y altas tasas de interés, no genera un lazo con el usuario y por el contrario, se posiciona en el imaginario del cliente como una deuda que crecerá con el tiempo, deteriorando su motivación al pagar.
5. Es transparente en tarifas y términos: La transparencia es un valor fundamental. Resulta vital que todos los términos y tarifas sean claros desde el principio, evitando sorpresas desagradables para los usuarios. Esto refuerza la confianza y muestra un compromiso genuino con la tranquilidad financiera de los clientes durante el proceso.
En un contexto donde el acceso al crédito puede ser restrictivo y excluyente, las plataformas como Tala, que ofrecen crédito basado en la confianza desde el dispositivo móvil, emergen como una alternativa inclusiva y segura, además de que redefinen los parámetros tradicionales del crédito al ofrecer un servicio transparente y seguro.